Jana Szenes
En la víspera de Iom Kipur, 11.10.1940, Jana Szenes escribió las siguientes líneas en su diario íntimo, que fueron publicadas luego de su muerte:
Quiero confesarme, rendir juicio ante mí misma, rendir juicio ante D'os, es decir evaluar mi vida, mis actos, frente al ideal más alto y puro presentado ante mí, comparar lo que debió ser con lo que fue.
Comenzaré esta confesión en nombre de la humanidad. No hay pecado en el mundo que no se encuentre este año entre las transgresiones, setenta veces más que el resto de los años… y el plan para el año que viene: estudiar y profundizar en la materia, en el idioma, en la búsqueda del camino. Ser persona.
Soy consciente de que esto último es difícil en las actuales circunstancias, pero lo intentaré. Porque es la única vía por la que conviene andar. ¿Pero cómo?
En un año veré si lo he logrado.
Quiero aún escribir un intento de poema (mi primer poema hebreo):
En las fogatas de la guerra, en el ardor, la quema,
entre los días tormentosos de sangre,
enciendo mi pequeña linterna,
para un ser humano buscar.
Las llamas de la fogata opacan mi linterna,
la luz del fuego me encandila,
¿Cómo observaré, cómo veré, cómo sabré, cómo lo reconoceré,
cuando lo tenga delante?
Dame una señal, oh D'os, muéstrame una señal sobre su frente
porque en el fuego, en las llamas y en la sangre,
aun reconoceré el brillo puro, eterno
de aquel al que busco: un ser humano.